En plena escalada de rebrotes por coronavirus, podría parecer una locura embarcarse en la compra de una vivienda. Sin embargo, a pesar de los estragos que está causando la Covid-19 en la sociedad y, sobre todo, en la economía, los planes inmobiliarios de muchos ciudadanos siguen su curso. Lo cierto es que la compraventa de vivienda experimentó fuertes caídas en los últimos meses. Según el Instituto Nacional de Estadística, en mayo se recortaron un -53,7%, mientras que en junio la caída fue del -34,3%. Ante esta situación, son muchos ciudadanos los que dudan entre si realizar la operación ahora o esperar un poco más, buscando una corrección en los precios. Desde pisos.com, tratan de arrojar algo de luz a esta situación de incertidumbre: 1 Financiación atractiva – Los tipos de interés están más bajos que nunca, por lo que el panorama financiero actual resulta propicio para el endeudamiento por la compra de una vivienda. Además, los bancos están ofreciendo condiciones ventajosas, sobre todo, para clientes con una situación laboral estable y un nivel de ingresos medio-alto. Esta situación puede dar un giro, dado que se espera un repunte en la morosidad debido al coronavirus, por lo que ahora es un buen momento para pedir una hipoteca. 2 Decisión rápida – Algunos expertos coinciden en señalar que existen oportunidades en la segunda mano y que apostar por ellas supone comprar por debajo del precio de mercado. Es cierto que tras unas semanas podrían incluso estar más baratas, pero si esperamos a que bajen más de valor, podemos correr el riesgo de que desaparezcan porque alguien se nos adelante. En estos momentos hay muchos inversores a la caza de pisos chollo, por lo que si ves una vivienda que te encaja, ve a por ella. 3 Oferta urgente – El coronavirus lleva aparejada la tragedia del fallecimiento de muchas personas mayores. Este sector de la población tan castigado por la Covid-19 está dejando en el mercado inmuebles en venta de los que los herederos, en muchos casos, se quieren deshacer con rapidez. Para el potencial comprador se trata de una gran ocasión para conseguir una casa a buen precio, dado que el margen de negociación es más amplio y es posible lograr un descuento interesante. 4 Obra nueva – Si tu interés se dirige hacia los nuevos desarrollos residenciales, es de esperar que los precios de esta tipología no se ajusten demasiado. Las promotoras están siendo muy prudentes y, aunque a la hora de la verdad habrá pequeños recortes, estos no supondrán un argumento de peso a la hora de inclinar la balanza hacia la compra. En cualquier caso, es un buen momento para seleccionar oferta, ya que la comercialización de esta clase de producto está siendo muy activa. 5 Situación personal – Antes de dar el paso y decidirse por la propiedad, hay que echar números y realizar un análisis consciente de cómo se verán afectadas nuestras finanzas. La situación laboral está plagada de incertidumbre, incluso para personas que acumulan años de antigüedad en empresas sólidas, dado que el impacto negativo del coronavirus abarca prácticamente todas las actividades económicas. Igualmente, es fundamental contar con ahorro previo y considerar nuestra capacidad de endeudamiento.
Cinco consejos para enfrentar la compra de vivienda durante la crisis sanitaria
En plena escalada de rebrotes por coronavirus, podría parecer una locura embarcarse en la compra de una vivienda. Sin embargo, a pesar de los estragos que está causando la Covid-19 en la sociedad y, sobre todo, en la economía, los planes inmobiliarios de muchos ciudadanos siguen su curso. Lo cierto es que la compraventa de vivienda experimentó fuertes caídas en los últimos meses. Según el Instituto Nacional de Estadística, en mayo se recortaron un -53,7%, mientras que en junio la caída fue del -34,3%. Ante esta situación, son muchos ciudadanos los que dudan entre si realizar la operación ahora o esperar un poco más, buscando una corrección en los precios. Desde pisos.com, tratan de arrojar algo de luz a esta situación de incertidumbre: 1 Financiación atractiva – Los tipos de interés están más bajos que nunca, por lo que el panorama financiero actual resulta propicio para el endeudamiento por la compra de una vivienda. Además, los bancos están ofreciendo condiciones ventajosas, sobre todo, para clientes con una situación laboral estable y un nivel de ingresos medio-alto. Esta situación puede dar un giro, dado que se espera un repunte en la morosidad debido al coronavirus, por lo que ahora es un buen momento para pedir una hipoteca. 2 Decisión rápida – Algunos expertos coinciden en señalar que existen oportunidades en la segunda mano y que apostar por ellas supone comprar por debajo del precio de mercado. Es cierto que tras unas semanas podrían incluso estar más baratas, pero si esperamos a que bajen más de valor, podemos correr el riesgo de que desaparezcan porque alguien se nos adelante. En estos momentos hay muchos inversores a la caza de pisos chollo, por lo que si ves una vivienda que te encaja, ve a por ella. 3 Oferta urgente – El coronavirus lleva aparejada la tragedia del fallecimiento de muchas personas mayores. Este sector de la población tan castigado por la Covid-19 está dejando en el mercado inmuebles en venta de los que los herederos, en muchos casos, se quieren deshacer con rapidez. Para el potencial comprador se trata de una gran ocasión para conseguir una casa a buen precio, dado que el margen de negociación es más amplio y es posible lograr un descuento interesante. 4 Obra nueva – Si tu interés se dirige hacia los nuevos desarrollos residenciales, es de esperar que los precios de esta tipología no se ajusten demasiado. Las promotoras están siendo muy prudentes y, aunque a la hora de la verdad habrá pequeños recortes, estos no supondrán un argumento de peso a la hora de inclinar la balanza hacia la compra. En cualquier caso, es un buen momento para seleccionar oferta, ya que la comercialización de esta clase de producto está siendo muy activa. 5 Situación personal – Antes de dar el paso y decidirse por la propiedad, hay que echar números y realizar un análisis consciente de cómo se verán afectadas nuestras finanzas. La situación laboral está plagada de incertidumbre, incluso para personas que acumulan años de antigüedad en empresas sólidas, dado que el impacto negativo del coronavirus abarca prácticamente todas las actividades económicas. Igualmente, es fundamental contar con ahorro previo y considerar nuestra capacidad de endeudamiento.
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