Un Rolls-Royce eléctrico que cuesta más que un piso

Comprar un Rolls-Royce clásico con un tren de impulsión cero emisiones y a la última es posible, aunque no barato. El preparador británico Lunaz ofrece la posibilidad de adquirir un modelo, aunque la escasez de «stock» hace que solo haya 30 huecos disponibles. Lunaz ha demostrado que puede conseguirlo al restaurar y equipar un nuevo sistema de impulsión eléctrico en un Rolls-Royce Phantom V de 1961. Le ha equipado además con una batería de 120 kW, lo que le permite recorrer cerca de 500 kilómetros con una sola carga. Durante el proceso, además, el coche ha sido totalmente restaurado. El coche ha recibido además una nueva tapicería en «cuero vegano» pensando en un comprador con conciencia medioambiental; ha recibido un sistema de infoentretenimiento digital avanzado y un sistema de navegación por satélite. El preparador, con sede en Silverstone (Reino Unido) avanza que los precios para quién esté interesado en uno de los 30 Rolls-Royce Phantom y Silver Cloud que pondrá a la venta oscilarán entre los 380.000 y los 550.000 euros, impuestos no incluidos. Todo un lujo, pero amable con el medio ambiente.