Libertad de expresión e información dependiendo de para qué y para quién. Ésa es la idea que defendió el miércoles el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, al cargar contra el ingreso en prisión del rapero Pablo Hasel por sus reiterados delitos de enaltecimiento del terrorismo, y reclamar minutos después «elementos de control» sobre los medios de comunicación. El nuevo ataque del líder de Podemos a los medios de comunicación se produjo, además, tan solo un día después de que defendiera el ejercicio pleno de la libertad de expresión para cuestionar el encarcelamiento de Hasel. A esta interpretación oscilante de los límites que deben presidir ese derecho se unió su criterio variable sobre el uso de la violencia como vía de reivindicación...
Ver Más
0 Commentaires